Algunos le llaman “andaina”; otros, “caminata”. También se usa el término “peregrinación”… El caso es que la visita a la Virgen de Pastoriza acostumbra a hacerse, durante el mes de octubre, con un pequeño sacrificio previo a la llegada. El sábado 22 de octubre por la tarde, un nutrido grupo de la catequesis parroquial (padres, hijos, catequistas…) se unían para cubrir la ruta simbólica “Meicende-Pastoriza”, trayecto corto pero intenso. Durante el mismo no faltó el aprovisionamiento de agua, chuches y otros “manjares” adecuados para caminantes. Una vez en el Templo parroquial se desarrolló la Catequesis y la Misa del Domund, adaptada a los más pequeños.